Donde la espalda pierde su nombre....

Buenos y navideños días;
Desde hace un tiempo hacia aquí me estoy dando cuenta que algo esta cambiando en la sensualidad de la ropa. Ya no encuentro escotes hasta el ombligo o canalillos exagerados por allá donde vaya y si os soy sincera, me gusta!

? Por qué?  Porqué odio la vulgaridad y me da la sensación que en muchos aspectos de la vida la mujer en todo se ha vulgarizado tanto que ha perdido la inocencia y la calidad que nos ha representado siempre.

Veo fotografías de mujeres hace años y me puede la curiosidad por saber quienes eran; irradian tal personalidad que a veces hasta las envidio; no la vida que llevaban o entrar en profundizar sobre sus circunstancias simplemente lo que proyecta su imagen mujeres fuertes, elegantes y conquistadoras sin necesidad de llevar escotes o minifaldas.

Si estas mujeres pudieran volver a vivir en esta nuestra gran época seguro que para sus grandes citas o eventos elegirian escotes traseros.

Y para muestra de ello algunos de los modelos que os muestro en este post.... puro derroche de  belleza y personalidad.

Puede que sea mujer y mi comentario ahora mismo no lo den por válido los hombres pero veo mujeres vestidas con escotes traseros y son la imagen viva de la elegancia y la sensualidad;  si fuera hombre sería incapaz de resistir la tentación en saber de la mujer que viste ese escote y al igual que la mujer de la fotografía antigua, vería la necesitad de conocer su historia.

Si quieres conquistar a un hombre interesante empieza a pensar en cambiar tus escotes y empieza a tapar  delantera para dejar al descubierto una verdadera tentación que siempre parece inalcanzable.

Dan personalidad, clase, elegancia y desmarcan de las tendencia al enseñar todo a cualquier precio.

Yo creo que eso se acabo y que por fin vuelve la cordura a vestir a la mujer porqué para mi insinuar siempre ha sido mucho más interesante que enseñar.

Espero que os valga mi humilde consejo de hoy.